La reconstrucción del lugar estuvo a cargo del arquitecto Alejandro Rivadeneyra; su aspecto se mira colonial con toques contemporáneos. Ejemplo es el patio central cubierto de acero y cristal donde sobresale La Giganta, obra de José Luis Cueva, hecha de bronce. La escultura de ocho metros de altos y con un peso de ocho toneladas fue creada exprofeso para el patio central.
El acervo que aquí se exhibe alcanza las más de 1860 piezas; Francisco Toledo, Manuel Felguérez, Arnold Belkin, Fernando de Szys-Varo, Leonora Carrington y otros artistas mexicanos y latinoamericanos están presentes en las salas del recinto.
En las salas principales se mira el trabajo del propio Cuevas; no hay que perder de vista una habitación dedicada a su trabajo y al de su esposa, Bertha Cuevas, y la sala Pablo Picasso, que contiene una colección de dibujos de Cuevas.
En su Centro de Documentación e Investigación Especializado Octavio Paz hay un amplio acervo bibliohemerográfico especializado en José Luis Cuevas: obra, trayectoria e imagen pública. En la librería y en la tienda hay una oferta de temas generales, carteles, postales camisetas y otros regalos. Aquí se venden unas y mascadas en seda italiana diseñadas y firmadas por José Luis Cuevas, que se presentan en fino estuche de madera.
Su espacio es escenario de puestas en escena, música, literatura, danza, dibujo y pintura, conferencias, presentaciones de libros, mesas redondas, cursos y talleres.