El camino que baja hacia la cascada está enmarcado por rocas y árboles de donde brota agua de manantial que acompaña hasta la cascada, la cual forma a sus pies pequeñas pozas de agua y una playita. Sobre el río Huazuntlán, el que alimenta la cascada, se observa un puente colgante desde donde se tiene una magnífica vista. Antes de ver la cascada, te recomendamos pasar al Centro Ecoturístico Jem Takxi; es de un sitio con siete cabañas de madera, un restaurante y área para acampar. Graciano, el patriarca y responsable del lugar, es un hombre amable que no duda en ser el guía hasta este paraíso.